Qué es un implante dental
Un implante dental es un tornillo fabricado con un material biocompatible, como por ejemplo el titanio, que se integra en el hueso maxilar del paciente con el objetivo de servir como fijación para colocar una prótesis sobre él.
Está prótesis dental puede ser tanto una simple corona (diente fabricado artificialmente) como un conjunto piezas dentales que pueden cubrir desde tres ausencias, como es el caso de un puente dental, hasta la totalidad de la arcada, como es el caso de las prótesis completas fijas o híbridas.
Ventajas de los implantes dentales
Entre otras ventajas, destacamos la gran estabilidad y durabilidad que presentan los tratamientos realizados con implantes dentales frente a la colocación de prótesis removibles:
- Estabilidad: Los implantes dentales se fusionan con el hueso maxilar o mandibular, lo que les proporciona una base sólida y estable para los dientes artificiales. Esto permite una masticación más eficiente y una función oral mejorada en comparación con las prótesis removibles.
- Durabilidad: Los implantes dentales son conocidos por su durabilidad y longevidad. Con el cuidado adecuado y un mantenimiento regular, pueden durar toda la vida. Una vez te colocan un implante dental es imprescindible visitar a tu dentista cada 6 meses con el fin de prevenir problemas, lo que aumentará considerablemente la durabilidad del implante.
- Conservación del hueso: Cuando se pierde un diente, el hueso en la mandíbula puede comenzar a reabsorberse con el tiempo y terminar desapareciendo. Los implantes dentales estimulan el hueso del maxilar, ayudando a mantener su densidad y forma naturales.
- Comodidad: Una vez incrustados sirven como base para la prótesis dental, por lo que esta prótesis no requiere de adhesivos, manteniendo siempre una posición fija.
- Higiene: A diferencia de una dentadura postiza, las prótesis con implantes se limpian junto con el resto de la boca durante el cepillado dental, por lo que no requieren otras formas de limpieza distintas.
Tipos de implantes dentales
Aunque existen multitud de tipos de implantes dentales, nos vamos a centrar en los más utilizados para tratamientos de restauración:
- Implante dental osteointegrado: Se trata del implante dental más utilizado y, como su propio nombre nos indica, va incrustado en el hueso del paciente. Los precios que vemos normalmente en promociones de clínicas dentales hacen referencia a este tipo de implante.
- Implantes dentales cigomáticos: Estos implantes se utilizan en pacientes que han experimentado una pérdida significativa de hueso en la parte superior del maxilar, conocida como “maxila”, y no son candidatos para implantes dentales convencionales. Los implantes cigomáticos se anclan en el hueso cigomático, que es más largo y robusto que el hueso maxilar superior. Son implantes mucho más extensos que los normales ya que necesitan alcanzar el hueso cigomático, atravesando completamente el hueso maxilar.
- Implantes dentales subperiósticos: Estos implantes se colocan debajo de la encía, pero sobre el hueso, en lugar de dentro del hueso. Se utilizan cuando el paciente tiene un volumen óseo insuficiente para sostener implantes endoóseos tradicionales. Los implantes subperiósticos a menudo se utilizan en la mandíbula para estabilizar dentaduras completas.
- Implantes dentales de plataforma estrecha: Estos implantes son similares a los implantes tradicionales pero tienen un diámetro más pequeño. Se utilizan cuando el espacio entre los dientes es limitado y no es posible colocar un implante de diámetro normal.
Precios de un implante dental
El precio de un implante dental con corona de zirconio monolítico es de 1.200€, aunque este precio varía en función de la clínica dental.